Hola, soy Claudio, un viajero del alma si me lo permites. A través de la fotografía he podido ir expresando algo que desde que tengo recuerdos he tenido y conservado; que es el espíritu de aventura y de descubrir y ver qué hay más allá.
De conocer y hablar con las personas, subir al techo, al cerro y la montaña. De las preguntas. De observar desde el pequeño espacio que habito y desde esa conciencia tan personal esta tremenda aventura llamada vida. De hacer fotos sin cámara, sólo para los ojos y el alma. De algunas veces hacer un clic virtual y no contar nada. De atestiguar lo que para mí es la belleza del momento (de cada momento), esa suerte de “ahora” que acaba de pasar, y que está pasando ahora, y ahora, en cada rincón, con o sin testigos; con o sin cámara.
La fotografía me ha llevado a muchísimos lugares y otros tantos me han llevado a la fotografía.
Qué linda suerte.
Me gusta esta parte, soy el único pasajero en el avión y estoy anclado en medio del pasillo entre los primeros dos asientos, mientras despegamos del aeropuerto más peligroso del mundo.
Pienso; “aunque me esté comiendo un pan con palta en medio de la cocina no tengo ninguna certeza de lo que va a pasar al segundo siguiente, ni ahora, ni ahora, ni ahora”...
Lukla, Nepal, en el corazón del Himalaya.
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